Compromiso

Ayer alguien me decía: "A mí me urge un curso como los tuyos, necesito eliminar este estrés!"
Y antes de que yo pudiera abrir la boca, la misma persona añande: "Pero no tengo tiempo eh?"

Definitivamente el compromiso con tu mayor deseo es la llave de arranque para el viaje por el cosmos entero dentro de tí.
No es el compromiso a los ishayas, no es el compromiso con alguna meditación, no. Es el compromiso que tienes contigo mismo. El compromiso a vivir plenamente eso que más deseas, recordando tu verdadera naturaleza, recordando quién eres, recordando que este es un juego y que viniste a ser parte de él.
El compromiso de ser feliz, de vivir paz y felicidad cada instante de tu existencia.

Qué tanto estás dispuesto a soltar y a dejar ir para quedar libre de carga y volar en tu mayor deseo. Volar en eso que tu corazón tanto quiere, soltar y descubrir que dentro de tí hay un espacio infinito, vacío de deberes, de porqués, vacío de preguntas y de pensamientos, un espacio lleno del néctar de la Verdad, del Amor.
Qué tanto es tu compromiso de aprender a vivir la vida como si pusieras un algodón de azúcar en tu boca y sin hacer nada se deshiciera en tu boca, con el sabor más dulce, disfrutando segundo a segundo la eternidad del momento.

Comprarte la idea de que no tienes tiempo para invertir en un viaje sin fin hacia tu interior y vivir en el caos de las programaciones que hemos adquirido a través de los años, es una gran estupidez, porque si no estás disfrutando el 200% de tu vida a cada instante estás perdiendo el tiempo.
Es como si al haber nacido te hubieran dado un ticket, que te da derecho a vivir las maravillas más espectaculares del juego y tú tomaras el boletito y lo tiraras a la basura, por ir a la casa de los problemas y quedarte ahí.

Comprometerte con tu mayor deseo, comprometerte con tu felicidad, con tu paz, es una elección de cada instante, ser consciente de la divinidad en tí y en cada partícula que te rodea hace que la vida sea un parque de diversiones y no un pantano que hay que cruzar para llegar a una puerta y al final ser feliz.

Muchos caminos llevan a Roma...yo vivo el que a mi ser le pareció más fácil y rápido, para que la vida sea un algodón de azúcar que se disuelve en tu boca dejando un sabor dulce y una sonrisa de oreja a oreja.

Vive tu mayor deseo!
Vive lo que tu corazón pide.

Haz un compromiso contigo mismo y vive tu derecho de nacimiento ya.