jueves, 7 de octubre de 2010

Iluminación, sin luces, cámara ni acción




Con el paso del tiempo, hemos escuchado hablar del despertar, de la Iluminación, de la meditación, de ir más allá, hemos leído acerca del reino de los cielos, del aquí y el ahora; acerca de Consciencia.
A mi eso de la meditación me parecía simplemente "lindo", qué bien por la gente que anda vestida de blanco y vibra el Ommmmm....pero realmente yo no creía que fuera del todo para mí.

Me incluyo en la lista de personas que cada vez que escuchaban algo acerca de meditación o gente que la practiba, imaginaba un monje de ropaje blanco, cabeza rapada, sentado en flor de loto sobre la cima de una montaña, vegetariano y con una voz muy suave al hablar, eso si, cuando hablaba...por eso yo nunca me identifiqué con esos monjes...

En el 2008 una persona del trabajo me invitó a un curso de meditación, honestamente no recuerdo cómo me lo vendió, pero contesté: "ah, le voy a decir a mi esposo, a él le gustan esas cosas"
Pues fuimos a la plática introductoria de "esas cosas", como su nombre lo decía, era la introducción, no significaba que estos monjes, el cual por cierto, era mujer, no venía vestida en cortinas blancas y no estaba rapada (porque la voz dulce sí la tenía) nos iban a revelar los secretos de la Iluminación, a menos que fueran a hablar de sistemas eléctricos.

Nos platicaba su experiencia de vida y cómo estas simples técnicas (porque en verdad parecía que eran más que simples) habían aparecido y cambiado su vida.
Yo podía ver algo en ella, en ese momento mi mente no explicaba, estaba knockeada  tirada, echa bolita en el fondo de mi bolsa. Estaba más que convencida que "eso" que ella tenía en su mirada yo lo quería también.
Es que era impresionante, como si nada pasara, en realidad nada, como algo enorme y vacío, lleno como de mucho Amor y Paz, no sé, algo muy extraño para mí en ese momento.

No necesité que empezara el curso para saber que había recobrado mi vida.
Más colorida y más latente que nunca, me daba risa, porque aún ni me enseñaban las 4 técnicas que ya me mataban del deseo enorme de tenerlas.

Y ahí, ese viernes, es el parteaguas de mi vida. Es la hoja doblada del libro o para que se oiga más romántico, la página donde quedaron los pétalos secos de la rosa (si fue romántico no? jajaja)

Así que aprendí las técnicas de la Ascensión de los Ishayas del Camino Brillante (el nombre suena largo pero la distancia entre lo que más deseas y tú es sólo un pequeño e insignificante pensamiento).

Estas técnicas logran todo. Digo todo, porque todos tenemos un mayor deseo, el más grande, el que más deseamos y  para mí, estas técnicas son como las lanchitas de Willy Wonka, que sólo te subes a ellas y te llevan en un lago de Chocolate hasta llegar a la fábrica llena de dulces.
Fácil, uh?

Lo más fácil de este asunto de la Ascesnsión es que no necesitas nada. No tienes que cambiar nada.
Nada de luces, cámara  y acción. Nada de show.
Nada de posiciones bizarras que hacen que conozcas el verdadero significado de la palabra "sufrimiento", nada de inciensos que te ahoguen o hagan lagrimear el ojo, nada de música con cascadas que te hagan querer ir al baño, nada sonidos de venados corriendo en la pradera, nada!
No es necesario que alguien te vaya guiando hacia el centro de nigún bosque, ni es necesario regresar al pasado o viajar a ningún tiempo. No. Nada de cambiar tus hamburguesas por comida para el conde Pátula.

Es tan fácil, tan natural!
Es algo que por naturaleza somos, así que al recordarlo nos volvemos como luces en árbol de navidad, tan brillantes, tan en casa, tan naturales...

La Ascensión de los Ishayas del Camino Brillante son unas técnicas extremadamente simples, lo que mejor me pareció es que a parte de que no necesitaba la lista anterior de cosas bizarras, lo podía hacer con ojos abiertos.
Estos monjes me explicaron que podía encontrar la paz totalmente incluso con ojos abierto, mientras trabaja, mientras platicaba, mientras cantaba, sí, incluso arriba del escenario podía ascender, dando una conferencia o haciendo lo que fuera.
Y en verdad fue delicioso.

Al empezar, cerré mis ojos, y tooooooda mi vida se juntó en un remolino de fotos, subió muy muy alto, y reventó, en billones y billones de polvos rosas y brillantes en el Universo y boom!!!!
Nada...
Total, serena, completa calma.
Por primera vez estaba experimentando plenamente mi mayor mayor deseo: PAZ.
Nunca había descansado tanto en mi vida, fueron los mejores 20min que conocía.

Y no necesitaba raparme ni tener una voz dulce! Jajajaja....

Desde ese momento mi existir cobró vida.
Y cada vez que yo elija, puedo tener en mis manos mi mayor deseo, brillante y vivo como yo.

Una "meditación" sin luces, cámara ni acción que va más allá de cualquier pensamiento, más allá de cualquier creencia, más allá de cualquier libro o ritual exótico...
Una herramienta tan simple, tan sencilla, tan amorosa, tan vacía de cosas, tan llena de tí...
Impresionante....

El Amor, la Libertad, la Paz, la Felicidad, la Iluminación, sin "Luces! Cámara! Acción!"

http://espanol.thebrightpath.com/


(Gracias MKI)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias Ishani!!! Eres puro amor muñeca, y me encanta la soltura y la frescura que compartes y me encata tu sabor!!! Tu eres el rio de chocolate y la fabrica de dulces :D te amo!!! atte SriVidya